Rivera del Duero...Denominación de Origen estrella

Dentro de todas las Denominaciones de Origen  que tienen cuna en España, se destaca una considerada como “Denominación de Origen Estrella”. Se trata de Ribera del Duero, cuyas vides regadas por el río de mismo nombre, otorgan características excepcionales a cada una de sus cepas producidas en torno al trabajo de 260 bodegas, distribuidas en una superficie que no abarca más de 2300 Km², que registra indicios históricos de producción vitivinícola desde el tiempo de los Romanos, de las cuales, Vega Sicilia, considerada una empresa ícono, despierta en el mundo del vino la idea de que Ribera del Duero es el simil español de Bordeaux.

En el 1975 ya se podía escuchar hablar del potencial de los vinos de la Rivera, en donde dos de sus grandes gestores, Don Jesús Anadon, Antiguo Gerente de Vega Sicilia y Don Pablo Peñalba López, Antiguo Gerente de Torremilanos, trabajaron para dar forma a lo que se convertiría mas tarde, en 1979, en la Denominación de Origen Provisional para Ribera del Duero, que se constituiría definitivamente en 1982, llegando a significar, en el año 2005, el equivalente al 20% del total de la extensión dedicada al cultivo de la vid en España.

El río Duero de 897 kilómetros de longitud, cuenta con una condición de propiedad internacional en 112 km de su extensión, mientras que 213 kilómetros corresponden a territorio portugués y una mayor parte de 572 km es  española, de la cual 115 kilómetros proveen del vital elemento a los vinos españoles que conforman esta Denominación de Origen, cuyas uvas tintas, Cabernet Souvignon, Mertlot, Malbec, Garnacha y Tempranillo  y una variedad blanca, Albillo, son las únicas autorizadas para la producción, con límites de 7000 kilos por hectárea, siendo estas reguladas por los mismos productores, y en caso de que alguno de ellos llegue a vendimiar más de lo establecido, este excedente no podrá formar parte de la Denominación de Origen.

Una de las características de mayor reconocimiento en la geografía del río Duero, se encuentra en su parte media, en donde sus aguas se deslizan en desniveles producto de la formación de terrazas fluviales. Otra característica importante de esta zona es su pluviometría que alcanza los 450 mm de lluvias anuales, con temperaturas extremas de 40°C en verano y -18°C en invierno.

La amplia gama de vinos producidos en la Ribera del Duero está segmentada en vinos jóvenes a Gran Reserva, distribuidas en más de 600 marcas para el consumo, condición que versatiliza la posibilidad de encontrar el gusto preciso según las exigencias de los amantes del vino.